A 3 meses de cerrar el ejercicio fiscal 2016, el Ministerio de Hacienda ratifica que estiman finalizar el año con un déficit en las cuentas públicas en 1,5% del Producto Interno Bruto (PIB), es decir, un saldo negativo de G. 2,341 billones (US$ 420 millones).
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“Estaríamos en línea con la Ley de Responsabilidad Fiscal, con todo el desempeño, la estimación tanto de ingresos y gastos y el nivel de inversión que se está proyectando llegaría para la Administración Central en 2,6% del Producto, estaríamos cerrando con un déficit fiscal de 1,5% para la Administración Central al cierre del ejercicio”, expresó el director de Presupuesto de la cartera económica, Óscar Lovera.
Mientras que el resultado estructural estimado para el año 2016 se ubica en un déficit del 0,7% del PIB. Esto implica que parte del déficit efectivo estimado para el 2016 tiene relación con el ciclo económico de menor crecimiento, que actualmente afecta a la economía paraguaya, restando recursos a la recaudación tributaria, explicaron autoridades del Ministerio de Hacienda.
El Resultado Estructural es la diferencia entre los ingresos estructurales y los gastos estructurales, lo cual refleja el resultado fiscal en condiciones de crecimiento económico normal o de tendencia. Con el término estructural se hace referencia a variables que están libres del efecto del ciclo económico y de medidas extra ordinarias o atípicas en materia fiscal.
“Calculamos de las dos formas, el déficit efectivo y el déficit estructural. Desde el año 2012, que teníamos un déficit estructural de 2,6%, hemos disminuido esto al 1,4% en el 2013, que se mantuvo en el 2014, 2015, y para este año el déficit estructural va a estar en 0,7% del PIB”, remarcó el titular de la dependencia fiscal, Santiago Peña.
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SIN RESTRICCIONES
Recordó que la actual Ley de Responsabilidad Fiscal permite gastar cualquier ingreso extraordinario que reciba el Estado. Ante esto trabajan en una innovador sistema fiscal denominado “Balance Estructural”. “Creemos que mirando hacia adelante y en un escenario como en el 2023, donde Paraguay comenzará a recibir ingresos extraordinarios por parte de las binacionales, es importante desarrollar esa institucionalidad, que permita blindar esos ingresos extraordinarios, para que no sean simplemente gastados en gastos corrientes, o gastos que no generen un retorno económico y social altos”, sostuvo.
La viceministra de Economía, Lea Giménez, mencionó que con una regla de balance estructural, se eliminará la volatibilidad del gasto corriente. “Le blindás a tu gasto corriente porque existe una regla que establece que cuando la economía está bien, te permite ahorrar, cuando la economía está mal, te permite gastar esos ahorros que pudiste hacer, y de esa forma eliminas esa posibilidad de que cuando estamos en un ciclo bajo se tenga que cortar programas sociales o gastos de inversión, por el hecho de que la economía está fluctuando”, enfatizó.LA NACION
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