El 85% de los asesinatos de periodistas queda impune y apenas hubo mejoras en 6 años

El 85% de los asesinatos de profesionales de la prensa quedan impunes y apenas hubo mejoras en ese aspecto en los últimos seis años, denuncia este sábado la Unesco en un informe publicado con motivo Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas.

“En 2022 y 2023, cada cuatro días un periodista fue asesinado simplemente por desempeñar su trabajo vital para buscar la verdad. En la gran mayoría de estos casos, nadie tendrá que rendir cuentas”, lamentó la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, en un comunicado con motivo de la difusión del estudio.

En ese bienio, que es el periodo analizado en el informe, fueron asesinados un total de 162 periodistas (88 en 2022 y 74 en 2023), lo que supone un incremento del 38 % respecto al periodo 2020-2021.

Entre los fallecidos 14 eran mujeres, un dato que la Unesco considera “alarmante” por tratarse de la cifra más alta desde 2017.

Casi la mitad de las 162 muertes totales se produjeron en zonas en conflicto armado -a raíz sobre todo del grave incremento de este tipo de muertes registrado en 2023- y el resto se produjeron sobre todo entre profesionales que cubrían la delincuencia organizada, la corrupción o que informaban sobre manifestaciones públicas.

En el caso de las muertes fuera de las áreas de conflicto, se registró un récord de 60 muertes en el año 2022, pero en 2023 la cifra cayó a su nivel más bajo desde 2008, con 30.

La región más peligrosa para la prensa en el bienio estudiado fue América Latina y el Caribe, especialmente por los 43 asesinatos de 2022, pero al analizar los datos de 2023 los peores indicadores se registraron en el área de los Estados árabes, con 29 muertes frente a las 18 de la región latinoamericana.

En su seguimiento de estos asesinatos para que se haga Justicia, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) señaló que hasta julio de 2024 y con expedientes que abarcan desde 2006, el 85% de las muertes están sin resolver.

“La tasa de impunidad se mantiene inaceptablemente alta”, subraya el informe, si bien la Unesco precisa que en los últimos años hubo avances leves: el porcentaje era del 89 % hace seis años y del 95% hace doce.

En los casos en los que sí se logra una resolución judicial, el proceso se demora una media de 4 años, un plazo que la organización de Naciones Unidas considera demasiado largo ya que “la justicia retrasada es justicia denegada”.

Ante esta situación, la directora general de la Unesco hizo un llamamiento a los 194 Estados miembros a “intensificar sus acciones para garantizar que estos crímenes no queden impunes”.

“Procesar y condenar a los responsables -recalcó Azoulay- es una herramienta clave para prevenir futuros ataques contra periodistas”.

Fuente: EFE. UH