Desde el Poder Ejecutivo se está ajustando el proyecto de ley para un marco a la función pública y el servicio civil que introducirá figuras, como las direcciones públicas, y busca otorgar previsibilidad y abarcar a todo el Estado.
La actual Ley de la Función Pública es sólo aplicable al Poder Ejecutivo luego de los recursos de inconstitucionalidad impulsados por el Poder Judicial y otros organismos con autonomía dentro de la estructura del Estado, recordó la viceministra de Capital Humano del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Andrea Picaso.
En la revisión del proyecto presentado durante el anterior periodo, la viceministra señaló que el proyecto «adolecía de los mismos vicios», por lo que se trabajó por realizar los ajustes pertinentes al proyecto que permitan, por un lado, aplicar los mismos parámetros para los funcionarios público y, por el otro, respetar las atribuciones de poderes y la autonomía de ciertas instituciones dentro del Estado.
«Queremos construir un proyecto de ley que realmente pueda representarnos a todos los servidores públicos y estaremos presentando seguramente en el transcurso de las próximas semanas, la última versión», indicó en su conversación con la vocera de Gobierno, Paula Carro.
Previsibilidad
Otro punto será que la ley permitirá «visualizar cómo será la carrera del servidor público», dijo. Esto implica una progresión de carrera, conforme a los años de servicio público y la evaluación de desempeño favorable. También contempla los ascensos verticales que serán por concurso entre los diferentes niveles o grupos ocupacionales.
En cuanto a los funcionarios en situación de contratados, se define claramente la relación de dependencia con su empleador, en este caso el Estado, y se define el vínculo jurídico existente por lo que los contratados pasarían a aportar en sus respectivas cajas de jubilaciones.
Alta dirección pública y cargos de confianza
Otra de las innovaciones que introducirá el proyecto corresponde a la figura de directivos públicos o alta dirección pública. Con este programa, implementado en Chile y Perú, las designaciones de posiciones directivas dentro del Estado serán por concurso, indicó Picaso.
Por último, se reducen el número de cargos de confianza, que son aquellos cargos que pueden ser designados de forma directa, a criterio de la máxima autoridad de cada institución. Con la reforma del servicio civil, solamente cuatro cargos podrán ser designados de esta forma: la dirección de Administración y Finanzas, la dirección o Asesoría Jurídica, la Secretaría General y la Jefatura de Gabinete.