Solo porque hace calor no significa que no puedas resfriarte.
Por
Rachel Nania,
AARP
¿Tienes secreción nasal? ¿Dolor de garganta? ¿Estornudos constantes? Si te encuentras luchando contra estos síntomas este verano, podría ser un resfriado. Aunque haga calor, de todas maneras puedes enfermarte.
“Los virus no prestan atención al calendario”, dice la Dra. Jill Foster, una profesora en la División de Enfermedades Infecciosas Pediátricas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota.
Es cierto que algunos virus son más estacionales que otros. La gripe, por ejemplo, normalmente alcanza su punto máximo en otoño e invierno y disminuye en primavera. Pero hay más de 200 virus que causan el resfriado común, y aunque algunos de ellos, como los rinovirus, son más propensos a aparecer en los meses de clima frío, otros tienden a circular en el verano.
“Tradicionalmente, el virus más común que es responsable de los resfriados de verano son los enterovirus”, dice la Dra. Lauren Block, una médica de atención primaria con Northwell Health y profesora asistente con el Institute of Health System Science en Feinstein Institutes for Medical Research en Manhasset, Nueva York.
Esta familia de virus causa alrededor de 10 a 15 millones de infecciones cada año en Estados Unidos, generalmente entre junio y octubre, según los Institutos Nacionales de Salud (NIH). Para estar claros, estamos hablando de enterovirus que no son polio. Hay algunas cepas del virus que también pueden causar polio, pero las vacunas las han eliminado en su mayoría de los países occidentales, dicen los NIH.
¿Los síntomas de un resfriado veraniego son peores?
En general, los resfriados veraniegos no son necesariamente peores que sus contrapartes invernales. Los síntomas causados por los enterovirus y los rinovirus son similares. Lo que puede hacer que un resfriado de verano parezca peor, sin embargo, es sentirse tan mal cuando no es la temporada típica de resfriados y gripe.
Si te resfrías en verano, puedes experimentar lo siguiente:
- Estornudos
- Dolores musculares
- Secreción o congestión nasal
- Tos
- Dolor de garganta
- Fiebre
Los enterovirus también pueden provocar un sarpullido en la piel o ampollas en la boca, y las personas pueden experimentar malestar estomacal u otros problemas digestivos, según Cleveland Clinic.
Si tus síntomas son peores, incluso parecidos a los de la gripe, podría ser otro virus. La COVID-19 no se ha adaptado a un patrón estacional, dice Foster, por lo que es posible que debas realizar una prueba para detectarla. Si el resultado es positivo, podrías tener derecho a recibir un tratamiento recetado, y cuanto antes comiences a tomar el medicamento, mejor funcionará.
Otro virus que puede causar síntomas respiratorios que imitan un resfriado, o algo peor, es el metapneumovirus humano. Si bien tiende a circular más a finales del invierno y la primavera, Foster dice que ha visto casos durante todo el año. “Ese es algo desagradable”, dice ella. “Tiende a causar más fiebre y tos. Realmente puede parecer gripe”.
No hay un tratamiento antiviral específico para una infección de metapneumovirus humano. Sin embargo, los investigadores están trabajando en el desarrollo de una vacuna para ayudar con la prevención.
Resfriado de verano vs. alergias: cómo distinguir la diferencia
En esta época del año puede ser difícil saber si tus síntomas se deben a un virus que causa resfriados o a alergias. Una forma de distinguirlo, dice Foster: a menos que tengas asma, las alergias rara vez provocan tos. “Entonces, si estás tosiendo, probablemente no sean alergias”.
Otra señal: tienes fiebre. Las alergias rara vez causan un aumento de temperatura. Además, los síntomas de alergia tienden a durar más tiempo, dice Block. “Entonces, si has tenido síntomas durante unas semanas, puede que en realidad sean alergias en lugar de un virus”.
Previniendo y tratando un resfriado de verano
¿Esperas no resfriarte este verano? Asegúrate de lavarte las manos a menudo. “Todos fueron muy buenos llevando consigo desinfectante de manos y lavándose las manos durante la pandemia de COVID”, dice Foster. “Realmente deberíamos intentar normalizar eso de nuevo”.
Además, mantente alejado de las personas enfermas y limpia y desinfecta las superficies que se tocan con frecuencia. Los virus que causan el resfriado pueden propagarse a través del contacto cercano con una persona infectada y al tocar objetos o superficies con el virus, y luego tocarse los ojos, la nariz y la boca.
No existe un tratamiento único para un resfriado de verano. Mantenerse hidratado es importante, afirman los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Y los medicamentos de venta libre pueden ayudar a aliviar algunos de los síntomas dolorosos que a menudo acompañan a una infección viral. “Ese [síntoma] realmente proviene del sistema inmunológico luchando contra el virus”, dice Foster.
Un enjuague nasal con solución salina puede ayudar a eliminar la congestión. “Te hace respirar mejor, especialmente si lo haces antes de dormir”, dice Foster. Hay mucha evidencia que demuestra que la miel puede ayudar a aliviar una tos.
Si comienzas a experimentar síntomas más severos —tienes fiebre de más de 100.5 grados durante varios días, te sientes débil, tienes problemas para mantener los líquidos o te falta el aliento— busca atención médica, dice Block. “Las personas mayores y las que tienen el sistema inmunológico comprometido son más propensas a que esto les suceda debido a una variedad de virus”, dice Block.
Finalmente, aunque no hay una vacuna que pueda ayudar a prevenir el resfriado común, hay vacunas que pueden atenuar los síntomas de otros gérmenes que causan enfermedades respiratorias, como la COVID, el RSV y la gripe. “Todos los virus y otras enfermedades que existen son una razón más para aprovechar todas las vacunas que tenemos disponibles”, dice Block. “Las personas realmente necesitan establecer [esas citas para la vacuna] en su agenda para septiembre u octubre”, agrega Foster.
