La Policía española y la Guardia Civil liberaron en 2023 a 1.466 víctimas de redes de trata y de explotación sexual o laboral, un 24% más que el año anterior, y la mayoría de las víctimas de trata y explotación sexual eran latinoamericanas.
Por otra parte, el pasado año detuvieron a 923 personas y desarticularon 109 grupos criminales, según el balance estadístico de 2023 publicado este lunes por el Ministerio del Interior.
De las 1.466 víctimas liberadas, hay 18 menores y otros tantos casos en los que una persona fue víctima de más de un delito, es decir, fue víctima de trata y también de explotación sexual o laboral.
Jóvenes de Colombia, Venezuela y Paraguay, las víctimas de la explotación sexual
Según recoge el informe, 294 víctimas fueron liberadas de las redes de trata de seres humanos para su explotación sexual, tres de ellas menores de edad. El perfil mayoritario es el de mujeres de entre 28 y 32 años procedentes de Colombia, Venezuela y Paraguay.
En el caso de las víctimas rescatadas de situaciones de explotación sexual, pero que no lo fueron de redes de trata, el número se eleva a 370 (nueve menores), mayoritariamente mujeres de 23 a 27 años, originarias de Colombia, España y Venezuela.
Las 196 operaciones policiales desarrolladas en el ámbito de la trata y explotación sexual culminaron con la desarticulación de 80 grupos y organizaciones criminales y la detención de 575 personas, la mayoría de nacionalidad española.
Además, en 2023 la Policía Nacional y la Guardia Civil realizaron 1.677 inspecciones administrativas en lugares de ejercicio de la prostitución, e identificaron a 7.049 personas en situación de riesgo por ejercer la prostitución en esos establecimientos, con un perfil mayoritario de mujer, de entre 33 y 37 años, de nacionalidad colombiana, española y rumana.
612 explotados laboralmente, sobre todo marroquíes y colombianos
Las víctimas rescatadas de situaciones de explotación laboral, pero sin la concurrencia de redes de trata de seres humanos, fueron 612, tres de ellas menores de edad.
En su mayoría eran hombres de entre 23 y 27 años, procedentes de Marruecos, Colombia y España.
En cuanto a las actuaciones contra las redes de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, liberaron a 195 víctimas, dos de ellas menores, y el perfil mayoritario es un hombre, de 23 a 27 años, natural de Colombia, Moldavia y Marruecos.
En este caso, los agentes desarticularon 28 organizaciones criminales y detuvieron a 334 personas y realizaron 5.893 inspecciones administrativas en centros de trabajo, que permitieron la identificación de 18.813 trabajadores.
Los cuerpos policiales también intervinieron el año pasado en cinco casos de trata con fines de matrimonios forzados, con cinco víctimas, dos de ellas menores, de nacionalidades marroquí, pakistaní y rumana. Las operaciones terminaron con la detención de 12 personas.
Fuente: EFE.