Gastón Glock, murió a los 94 años. El empresario austriaco, enigmático y controvertido inventó a principios de los años 1980 la pistola que lleva su nombre, elevada a mito por cantantes de hip hop y el cine de Hollywood.
Se trata de una de las pistolas más vendidas en las últimas cuatro décadas por ser ligera, rápida y de mecánica infalible: la Glock, un objeto de culto tanto entre sicarios como amantes de las armas y miembros de las fuerzas de seguridad,
También es una de las más controvertidas ya que su potencia de fuego y su fácil manejo la hacen especialmente letal -numerosas masacres en Estados Unidos se perpetraron con ella- y estuvo en el centro del debate sobre la permisividad con las armas en ese país.
La fortuna y la fama de Glock están unidas a la pistola que inventó y a la forma en la que lo hizo.
Gaston Glock, entonces un ingeniero cincuentón que trabajaba en una planta de radiadores y se ganaba un sobresueldo fabricando cuchillos en el garaje de su casa, se presentó en 1980 a una licitación del Ejército austríaco sin tener ninguna experiencia previa con armas de fuego.
Después de consultar y asesorarse con numerosos expertos decidió crear una pistola desde cero -obviando los modelos previos- y con la idea de que tuviera las mínimas piezas posibles y fuera fácil de usar y mantener.
El resultado fue una pistola más ligera porque empleaba de forma novedosa piezas plásticas, muy fácil de desmontar, compacta y de estética minimalista, con más balas en el cargador -17- y que nunca se encasquillaba.
También más barata y fiable que otras, el arma ganó la licitación del Ejército austríaco, y a los pocos años revolucionó el mercado de las pistolas automáticas, sobre todo en Estados Unidos, el más grande y lucrativo, donde se estima que hasta el 80 % de los policías estadounidenses confían en las Glock. Su pistola se convirtió en una referencia en el sector.
La forma en la que Glock inventó la pistola, en el garaje de su casa y desde cero, llevó a algunos a compararlo con Steve Jobs, el visionario fundador de la compañía Apple.
Otros lo compararon con Mijaíl Kaláshnikov, el oficial soviético que inventó el legendario fusil automático con el que comparte los atributos de solidez y fácil uso.
Glock siempre huyó de la exposición pública, también cuando se convirtió en una de las mayores fortunas de Austria, con más de mil millones de dólares, y tanto su empresa como su persona estuvieron envueltas siempre en un halo de misterio.
A ello contribuyó también su política de demandar a los medios de comunicación que informasen sobre la empresa de forma negativa.
Muy poco se sabe de la vida privada de Glock salvo episodios aislados como que en 1999 fue víctima en Luxemburgo de un intento de asesinato encargado por un antiguo socio.
A medida que aumentaba la leyenda de la pistola crecían las cifras de negocio y la producción, hasta convertir a Glock en una multinacional que fabrica un millón y medio de armas por año, según el documental Weapon of Choice, dedicado a la pistola.
Su director, Fritz Ofner, relató a EFE que la empresa exige a sus trabajadores firmar un estricto compromiso de confidencialidad.
La empresa emplea a más de 2.300 personas en cuatro fábricas, dos de ellas en Austria, en las localidades de Deutsch-Wagram y de Ferlach, donde es el empleador más grande y “rige una cultura del silencio”, cuenta Ofner.
En 2022, registró una facturación de 829,5 millones de euros y un beneficio neto de 515,44 millones de euros, al tiempo que aumentó el número de sus empleados hasta 2.519.
Al comunicar el fallecimiento de Glock en un comunicado, la compañía resaltó que Glock había previsto “la continuidad y estabilidad de la empresa”, de forma que su “trabajo de toda una vida continuará en su espíritu en el futuro”.
En 2011, Gaston Glock se divorció de Helga, la mujer con la que estuvo casado 49 años, y se casó con Kathrin Tschikof, 52 años más joven. La lucha de su ex mujer por parte de la fortuna familiar atrajo la atención de los medios, según los cuales la disputa matrimonial enturbió la relación con sus dos hijos y su única hija.
Al 90 cumpleaños del magnate, organizado por su nueva mujer, acudieron en agosto de 2019 estrellas como la modelo Naomi Campbell, los actores Hugh Grant y John Travolta o el cantante Robbie Williams, entre otros.
La propia Kathrin Glock, su nombre de casada, difundió imágenes de la celebración en su Instagram, rompiendo con el secretismo que imperaba en la familia hasta entonces.
Otro aspecto polémico de Glock es su relación con la formación ultraderechista austríaca FPÖ. Es conocida su amistad con el fallecido histórico líder ultra Jörg Haider, a quien incluso acompañó en 2002 en un viaje a Bagdad para visitar al entonces dictador iraquí Sadam Husein.
Una investigación conjunta del diario Der Standard y de la revista digital Dossier revelaba “una estrecha relación” entre Glock y el partido ultra en los últimos años.
Altos cargos de esa formación -según esa investigación- son asiduos de actos sociales de la empresa, como carreras hípicas y otro tipo de eventos.
El FPÖ, actualmente en la oposición y primero en los sondeos sobre la intención del voto, es conocido desde hace años por favorecer una política de armas más laxa, tanto en cuanto a posesión personal como para las exportaciones de armamento fabricado en Austria.
Fuente: EFE.