Rusia cometió «crímenes contra la humanidad» en su guerra en Ucrania, aseguró hoy la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, en su discurso en la Conferencia de Seguridad en Múnich, un foro internacional que reúne a líderes, políticos y expertos de unos 100 países y a la que Moscú no fue invitada por primera vez en dos décadas.
«Estados Unidos estableció formalmente que Rusia cometió crímenes contra la humanidad en Ucrania», dijo Harris.
«Hemos examinado las pruebas, conocemos las normas legales y no cabe duda de que se trata de crímenes de lesa humanidad», subrayó.
La vicepresidenta citó casos de ejecuciones sumarias, torturas y violaciones por parte de las fuerzas rusas en Ucrania, así como «el traslado de cientos de miles de civiles ucranianos» a Rusia.
«Les afirmo a todos los que han perpetrado estos crímenes y a sus superiores o cómplices: ustedes responderán», añadió, en declaraciones que reproduce la agencia de noticias AFP.
Esta es la primera vez que Estados Unidos designa formalmente a Rusia como país que cometió crímenes de guerra y contra la humanidad en Ucrania desde la invasión rusa el 24 de febrero de 2022.
En un comunicado separado, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, aseguró que «no se trata de actos al azar o aislados», y habló de un «ataque generalizado y sistemático del Kremlin contra la población civil en Ucrania».
Subraya además que, al utilizar esta calificación de crímenes de lesa humanidad, Estados Unidos se compromete a que esos miembros de las fuerzas rusas y otros responsables, que no están aún identificados, «rindan cuentas de sus actos» ante la justicia.
«No puede haber impunidad para estos crímenes», concluye Blinken.
Desde el inicio de la invasión, Estados Unidos documentó o catalogó más de 30.600 casos de crímenes de guerra cometidos por las fuerzas rusas en Ucrania, precisa el Departamento de Estado estadounidense.
En el segundo día de la conferencia de Múnich, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, pidió más apoyo militar para Kiev, al afirmar que esa será la única vía de frenar los avances del presidente ruso, Vladimir Putin.
«Debemos darle a Ucrania lo que necesita para ganar y prevalecer como nación soberana e independiente en Europa», dijo.
«El mayor riesgo de todos es que Putin gane. Si Putin gana en Ucrania, el mensaje para él y para otros líderes autoritarios será que pueden usar la fuerza para conseguir lo que quieran», afirmó.
El Kremlin moviliza «a centenares de miles de tropas» y está obteniendo «más armas de países autoritarios como Irán y Corea del Norte», subrayó Stoltenberg.
Por su parte, al hablar hoy en la Conferencia de Seguridad de Múnich, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, llamó a los aliados occidentales a «redoblar esfuerzos» en el apoyo militar a Ucrania.
«Debemos redoblar y continuar con el apoyo masivo necesario para hacer fracasar los planes imperialistas de Putin», dijo.
«Es hora de acelerar, porque Ucrania necesita equipo para sobrevivir», insistió la presidenta de la Comisión, el brazo Ejecutivo de la Unión Europea (UE).
En ese marco, los miembros de la UE están estudiando la posibilidad de realizar compras conjuntas de municiones para Ucrania.
Por el contrario, la vicepresidenta colombiana, Francia Márquez, pidió hoy en Múnich tener una visión desmilitarizada de los temas de seguridad.
«Seguir discutiendo quién pierde y quién gana en una guerra no es bueno. Todos hemos perdido y quien pierde en una guerra es la humanidad», dijo en una mesa redonda.
«Hoy la gran parte del mundo se siente insegura. Pero creo que hay que hacer una reflexión más profunda. Porque la seguridad no se resuelve con armas», agregó.
Márquez se refirió también a otros factores que causan inseguridad, como la crisis climática con todas sus consecuencias, la crisis migratoria y la inequidad.
«Un nuevo orden mundial tiene que poner la vida en el centro y no es la militarización. Nosotros no tomamos ningún partido sobre la guerra, porque la guerra ha destrozado a la humanidad», dijo. Télam