“El amor nunca hace daño”: Las claves para una relación sana

Bajo la frase de “el amor nunca hace daño”, en el marco del Día de los Enamorados, el sicólogo Osvaldo González brinda las claves para que las relaciones de pareja sean efectivas y estén libres de violencia.

Este 14 de febrero se conmemora el Día de San Valentín o Día de los Enamorados. Si bien es una fecha en la cual se recuerda la importancia del amor en la vida, este año llega en medio de alarmantes cifras por casos de violencia y feminicidios.

Esto lleva a que la sociedad paraguaya se replantee la forma en la que se configuran los noviazgos y matrimonios y entender la necesidad imperante de dejar de romantizar el machismo, afianzar la autoestima, el mutuo respeto y erradicar la problemática que afecta a mujeres de todo el país.

El sicólogo Osvaldo González, especialista en atender a mujeres víctimas de violencia y parejas en conflicto, resaltó que “el amor nunca hace daño”, por lo que dio a conocer una serie de recomendaciones para que la relación sea sana y esté libre de violencia:

1- Contar con responsabilidad afectiva en la pareja

Explicó que esto implica que ambas partes sean capaces de hacerse cargo de lo que se genera afectivamente en el otro. Señaló que mayormente esto se registra en los varones, debido a que no piensan en lo que sus parejas puedan sentir con las decisiones que toman.

“Cuando su pareja le reclama, el varón se desentiende y cuestiona incluso a la mujer, manifestando que está exagerando o que es una histérica. En una pareja sana, la persona se hace cargo de lo que generan en el otro sus actos y palabras”, añadió.

2- Tomar conciencia de las acciones machistas que ejerce el varón

Dijo que lo primero es asumir que uno es machista para luego tomar el compromiso de cambiar en ese aspecto. Afirmó que el machismo no es una cuestión de salud mental, sino que es algo más cultural y que no implica solo ser violento.

“Muchos pacientes me dicen que no son machistas porque no le pegan a su pareja, pero tienen actitudes machistas, como controlar cómo se viste su pareja o no quieren que la misma se junte con alguna amiga, porque dice que es mala influencia”, expresó.

3- Reconocer el machismo internalizado en las mujeres

El especialista explicó que existe algo que se conoce como “machismo internalizado”, que se refiere principalmente a las actitudes machistas que adoptan las propias mujeres, dejando a un lado las responsabilidades que deben ser compartidas.

“No es que la mujer es machista, sino que entiende la relación de pareja desde el machismo. Deja que el hombre haga todo o que pague todo o que para ella el hombre tiene que tener un papel más activo”, ejemplificó.

4- Identificar y buscar mejorar los rasgos de personalidad que dificultan la relación

En este caso —dijo— se trata de una tarea tanto para la mujer como para el hombre, ya que en cualquiera de los dos pueden existir rasgos de la personalidad que afectan el buen desarrollo de una relación.

“Por ejemplo, una persona que es ansiosa, egocéntrica o una muy miedosa. También se debe reconocer si se es muy insegura, lo que puede derivar en ser una persona muy celosa. Se puede querer mucho, pero si la persona no es consciente de esos rasgos, puede hacer mucho daño a la pareja”, detalló González.

Recalcó que estas situaciones no constituyen un problema de pareja, sino más bien son algo individual, mientras que la única forma de mejorar es identificando cada rasgo y acudiendo a terapia profesional.

Añadió también que el famoso término de “tóxico o tóxica”, que se emplea actualmente para referirse a una persona muy celosa, no es abordado como tal en la Sicología, sino que forma parte de los rasgos de personalidad no sanos.

“No es que la persona quiere ser así, más bien no está identificando que es así. Una persona muy inseguridad termina siendo celosa o alguien muy impulsivo tiende a ser violento con la pareja”, acotó.

5- Ser transparentes a la hora de definir qué tipo de relación se quiere tener

Seguidamente, como otra clave para tener una relación sana, el profesional de la salud mental señaló que ambas partes deben ser sinceras y hablar con determinación sobre cómo se proyecta la relación, si se quiere exclusividad o no.

Al respecto, aseguró que, de acuerdo con la Sicología, una persona sí puede llegar a querer o amar a dos personas a la vez, pero que lo importante es saber sobrellevar con madurez las relaciones de ese tipo.

“Ahora está ese tema de las relaciones abiertas, sobre todo los varones, porque son los que usualmente tienen más de una pareja. Una cosa es enamorarte de dos personas, pero otra cosa es poder llevar sanamente una relación así, que es muy difícil, pero se debe ser transparente”, destacó.

También mencionó que en el noviazgo se debe definir si ambos buscan casarse o si planifican su futuro juntos, siempre en consonancia con los ideales y el proyecto de vida del otro.

6- Saber reconocer y reparar los conflictos

Como sexto ítem, el licenciado sugirió que las personas deben ser conscientes de que toda pareja puede tener sus conflictos, pero lo que importante es saber reparar el inconveniente juntos y sobre todo sanamente.

Manifestó que incluso prácticamente no es sano que dos personas en una relación no tengan problemas, debido a que esto es algo que forma parte de la naturaleza de interactuar entre dos seres humanos.

“Hay parejas que no se pelean nunca, pero generalmente es porque uno de los dos es más sometida y hace todo lo que el otro quiere; o ambos evitan el conflicto y callan. Lo ideal es que sepan resolver el inconveniente”, afirmó.

Aseguró que hasta después de una grave infidelidad se puede volver con la persona, pero siempre y cuando sea tras haber realizado una terapia, haber reparado el daño y con un compromiso real.

“Muchos se dejan un tiempo después de una infidelidad y luego vuelven solo diciendo ‘olvidamos lo que pasó y seguimos’. En realidad eso es para peor porque la herida queda y con los años se vuelve más difícil de reparar”, sentenció.

7- Buscar conocerse a profundidad y no apurar los procesos

Osvaldo González señaló que otra recomendación es que ambas personas en una relación sentimental se conozcan a profundidad, atravesando todas las etapas de una pareja y sin acelerar los procesos.

En ese sentido, dijo que un grave error es irse a vivir con el otro en pocos meses de noviazgo, así como casarse en menos de dos años de haber iniciado la relación.

“A veces en un año recién se conocen y ya quieren vivir juntos, es un error no quemar etapas. Para casarse, dos años más o menos, pero depende también, porque hay parejas que tienen ese tiempo juntos, pero poco hablan de muchas cosas”, reforzó.

8- Comprender que debe haber consentimiento en la relación sexual de la pareja

También recordó que dentro de los noviazgos, sobre todo en matrimonios, muchas veces existen violaciones, pero que se confunden por el simple hecho de que se trata de la pareja. Sostuvo que lo más importante es que siempre se respete el deseo del otro y que haya consentimiento.

“No importa si es tu novia o tu esposa, si ella no quiere, es no. Forzar la intimidad es violación. Las relaciones sexuales deben ser siempre desde el deseo de ambos, en cuanto al cuándo y al cómo también”, sentenció.

9- Buscar ayuda profesional ante los problemas, ya que el amor no es suficiente

Ante los signos y señales de machismo, violencia u otros conflictos en la pareja, el profesional recomendó principalmente acudir a consultas sicológicas a fin de resolverlos, sobre buscando la ayuda a tiempo.

“A veces dos personas se pueden amar mucho, pero eso no es suficiente. No basta con estar enamorados para que la relación funcione, hay otros factores que influyen. Lo importante es que busquen ayuda temprano, porque a veces llegan ya muy dañadas a terapia y ya no se puede reparar la relación”, afirmó.

Feminicidios y violencia, ¿van en aumento?

Finalmente, el sicólogo abordó en general la problemática sobre los casos de violencia familiar y feminicidios que se reportan últimamente en Paraguay.

Dijo que considera que en realidad no aumentaron a lo largo de los años, sino que tienen mayor visibilidad, lo cual calificó de positivo, pero no suficiente para disminuirlos.

“Yo creo que antes incluso había más, solo que estaba normalizado, entonces no se veía como un problema y ahora está más visibilizada la problemática”, afirmó.

Si bien señaló que hubo un pequeño avance en cuanto a la lucha contra la violencia contra las mujeres y la eliminación del machismo, lamentó que a Paraguay todavía le “falta muchísimo” y que se siguen normalizando las situaciones de violencia y machismo en la pareja.

“Alguien que le mata a su pareja no siente amor ni es un momento de locura. El machismo convierte a la mujer en un objeto del hombre, tanto así que este cree que puede o tiene derecho de hacer con ella lo que quiere. El feminicidio no tiene nada que ver con el amor. El amor nunca lastima, nunca hace daño”, finalizó. UH.

UH