Entre los errores frecuentes se encuentra el uso excesivo de calor, no aplicar tratamientos o usar productos inadecuados. El cabello también necesita de ciertos cuidados a la hora de ir a dormir y te contamos cuáles.
La piel realiza una serie de procesos de regeneración celular cuando dormimos, esto también incluye al cuero cabelludo. Esto es fundamental para que el pelo se mantenga lindo y saludable, pero se desconocen las pautas necesarias para que este proceso se cumpla correctamente.
Por eso, y para que puedas mantener tu cabellera soñada, tomá apunte de los siguientes errores:
1.No cepillar el cabello antes de ir a dormir
Este es un paso fundamental antes de dormir. Peinar el cabello va más allá de evitar las molestas porras. Cuando peinamos el cabello deshacemos los nudos, se distribuye los aceites naturales a lo largo de la melena, tiene un efecto exfoliante y alisa la cutícula capilar.
Cuando no peinamos el cabello antes de ir a dormir, el resultado es una melena enredada, grasa, opaca y -probablemente- con mucho frizz.
2.Acostarse con el pelo mojado
Una buena ducha antes de ir a dormir puede ser el mejor relajante, pero es fundamental secar el cabello antes de ir a la cama. La realidad es que el cabello húmedo es más frágil y la fricción con la almohada puede favorecer el quiebre de las hebras capilares.
Por otro lado, el exceso de humedad en el cuero cabelludo favorece la aparición de caspa, eczemas, irritación e incluso la formación de sebo que deriva a un cuero cabelludo graso. Lo ideal es dejar que la melena se seque al aire libre y, en el caso de que quieras acelerar el proceso, usar secador de pelo pero a temperatura baja.
3.Realizarse peinados muy apretados
Dormir con el cabello suelto no es positivo, pero realizarse peinados muy apretados tampoco es lo recomendado. Se puede dormir con un rodete, una coleta o una trenza, pero tiene que estar suelta y la goma que se use para atar el cabello debe ser de satín -en lo posible-
Peinar muy fuerte la melena promueve el quiebre del cabello, lo debilita y, en el peor de los casos, alopecia por tracción.
4.No aplicar tratamientos nocturnos
Este paso no es tan obligatorio, especialmente si se usan mascarillas hidratantes y nutritivas. Pero aplicar aceites, serums u otro tipo de tratamientos a la hora de ir a dormir ayuda a tener el cabello más saludable.
4.Usar ropa de cama de algodón
Algodón u otros materiales ásperos y porosos. Estos tejidos absorben la humedad natural del cabello y la piel. Lo mejor es invertir en fundas de seda o satín que, además de ser materiales muy agradables para dormir, favorecen la salud capilar, previenen la rotura de las hebras capilares y que el cabello se enrede. Eso sí, es importante cambiar la ropa de cama, al menos dos veces por semana.
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