El multimillonario saudí Al Waleed Bin Talal, uno de los propietarios de Twitter, se unió a la nueva empresa privada de Twitter anunciada por el CEO de Tesla y SpaceX, Elon Musk, tras adquirir el sitio de microblogging más famoso del mundo.
Así lo informó el último viernes en un comunicado la Kingdom Holding Company (KHC) y la oficina privada del príncipe Al Waleed Bin Talal.
El texto anuncia la transferencia de su participación en las acciones actuales de Twitter, que ascienden a 34.948.975 acciones valoradas en 1.890 millones de dólares, a la nueva empresa de Twitter dirigida por Musk.
“Querido amigo ‘Jefe Twit’, Elon Musk, juntos en todo el camino”, dijo Al Waleed en su cuenta de Twitter, después de que el propio Musk anunciara la adquisición de la red social.
La operación, lo convierte en lel segundo mayore accionistas después de Musk.
El pasado mes de abril, el saudí rechazó la oferta de Musk, también consejero delegado de Tesla, de 43.000 millones de dólares (cerca de 40.000 millones de euros) para comprar la red social.
“No creo que la oferta propuesta por Elon Musk (54,20 dólares por acción) se acerque al valor intrínseco de Twitter, dadas sus perspectivas de crecimiento”, dijo entonces el príncipe.
Elon Musk (REUTERS/Mike Blake/Archivo)
Tras convertirse el viernes en el propietario único de Twitter, Musk dio sus primeros pasos en esta nueva etapa en la red con dos movimientos más o menos esperados: el despido de su cúpula directiva y su salida de la Bolsa de Nueva York, además de una nueva política de moderación de contenidos.
En la noche del jueves, Musk tuiteó “el pájaro ha sido liberado”, lo que fue interpretado unánimemente como el anuncio de que la operación de compra de Twitter se cerraba por 44.000 millones de dólares, tras varios meses de vaivenes del imprevisible multimillonario, el hombre más rico del mundo.
Aunque no lo hizo público, unas horas antes se supo que Musk había comunicado a los cuatro directivos más importantes de la red que estaban despedidos, entre ellos el consejero delegado, Parag Agrawal, según publicaron los principales medios estadounidenses.
Consejo de moderación
Musk anunció eel último viernes que creará un “consejo de moderación de contenidos” en la plataforma, que se caracterizará por incluir “puntos de vista ampliamente diversos”.
Musk, que ha elegido su propia cuenta de Twitter para comunicar algunas de sus intenciones, señala en su último tuit que “mientras ese consejo no se reúna, no habrá mayores decisiones sobre contenidos ni restablecimientos de cuentas”.
Con esa última frase, Musk parece referirse a todos aquellos que han visto sus cuentas bloqueadas en los últimos años por violar las políticas de contenido de la red, mayormente por publicar mensajes de odio o escribir insultos en sus cuentas.
La cuenta más prominente de las bloqueadas ha sido la del ex presidente estadounidense Donald Trump (2017-2021), expulsado de Twitter y de otras redes sociales como Facebook tras el asalto al Capitolio en enero de 2021, al considerar que había instigado desde su cuenta a sus seguidores para protagonizar aquellos hechos violentos.
Hoy mismo, el propio Trump saludó la toma de control de Twitter por parte de Musk al publicar en su red social Truth que se sentía “feliz porque Twitter está ahora en manos (de personas) cuerdas”, pero no aclaró si tenía intención de regresar como usuario a una red de la que llegó a hacer un uso casi compulsivo.
Según algunos de los principales medios de prensa de Estados Unidos, la primera medida de Musk tras hacerse con las riendas de la empresa ha sido despedir a algunos de sus máximos directivos, entre ellos el consejero delegado, Parag Agrawal, así como el director financiero, Ned Segal, y la máxima responsable de políticas y asuntos legales, Vijaya Gadde.
Sin embargo, Musk aún no ha confirmado, ni mediante tuits ni de ningún otro modo, el cese de la plana mayor de Twitter y las condiciones inherentes a esos despidos.
(Con información de EFE)