Asunción, Agencia IP.- El jefe de Estado, Mario Abdo Benítez, resaltó el impacto positivo que tendrá el Puente Héroes del Chaco, ya que impulsará el desarrollo urbanístico de ambas márgenes del río Paraguay. El proyecto es altamente significativo, atendiendo a que fue construido durante el momento duro de la pandemia, recordó.
El presidente recordó que el Puente Héroes del Chaco será la primera unión física que tendrá Asunción con la Región Occidental desde su fundación, hace 485 años. Esto, a su vez, permitirá el paso de unos 10.000 vehículos por día, cambiando así la dinámica entre ambas regiones para consolidar la integración definitiva entre Asunción y las ciudades fronterizas de la Argentina.
Abdo Benítez dijo que es una obra emblemática que reforzará la conectividad de la capital de la República, Asunción, con el Chaco paraguayo. Esto simboliza un reconocimiento a todos los héroes del Chaco, por eso lleva esta denominación, recordó este lunes durante la habilitación de obras en la zona del Parque Lineal II.
El mandatario exteriorizó en que, el proyecto es altamente significativo, atendiendo a que fue construido durante el momento duro de la pandemia, donde la mayoría de los sectores estaba paralizado por la cuarentena, no así el de la construcción que siguió operando con fuerte protocolos de sanitarios.
“Es fruto de la resiliencia, del sacrificio de un pueblo paraguayo que así como los héroes del Chaco que lucharon por la defensa nacional, en este tiempo difícil también la gente pudo seguir trabajando”, subrayó.
El gobernante indicó que el puente tiene un simbolismo de heroísmo de todo el pueblo paraguayo, principalmente de los trabajadores de la salud y de la construcción que pese a la pandemia siguieron cumpliendo con sus respectivas funciones.
La referida infraestructura tendrá una extensión de siete kilómetros. El mismo abarcará desde la Costanera Norte de Asunción hasta la rotonda de la ruta entre Falcón y Remanso.
Los viaductos de acceso serán de vital importancia para la protección del ecosistema del territorio inundado del río Paraguay, especialmente de la margen derecha, donde habitan especies nativas de los humedales.
El proyecto es una obra emblemática del Gobierno Nacional ejecutado por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) que fue adjudicada por primera vez a dos empresas paraguayas (CDD Construcciones y Constructora Heisecke) que integran el Consorcio Unión.
