En la ciudad de Acahay se encuentra en sus mejores momentos el cultivo de mamón orgánico, una fruta altamente demandada en el país. El productor local Armando Araújo, encargado del cultivo, señaló que cuentan actualmente con 200 plantas que ya generaron una cosecha de al menos 1.200 kilogramos en este año.
Desde el 2020, Armando Araújo lleva adelante un emprendimiento junto con su familia que, para principios de este año, ya dio grandes frutos. En el departamento de Paraguarí, en el distrito de Acahay dispone de al menos media hectárea de cultivos de plantas de mamones, que además de que ya lo están cosechando, cuenta con un agregado especial: totalmente libre de químicos.
“Nos íbamos en el súper y veíamos que el precio de los mamones era carísimo, de G. 35.000 a G. 40.000 estaba hasta hace poco y la calidad no era tan buena. Entonces nosotros ahí hablamos con una tía y decidimos empezar con esta iniciativa y sólo vamos a producir productos orgánicos. Entonces empezamos con pocas plantas para poder manejar el cultivo y estamos cosechando ahora”, expresó Araújo.
El compromiso con la naturaleza es bastante serio debido a que desde su inicio hasta hoy estos cultivos de mamones no se realizaron a través de ningún tipo de agente contaminante, según refiere Armando. Explicó que desde el momento de la germinación de las semillas hasta su colocación en macetas lo realizaron a través de procedimientos orgánicos, en donde hasta las macetas para los plantines debían descomponerse para hacer parte de la planta.
“Fue todo un desafío, por decirlo de alguna manera, porque desde el vamos nosotros no usamos productos que sean nocivos para la naturaleza. Pusimos macetas de papel diario, del semillero pasamos todo ahí, esperamos un mes y vivimos acá en Acahay, en donde se quedan en forma definitivo. No usamos esa maceta negra de hule, todo lo que usamos se descompone”, detalló.
Preparación de suelo
Armando señaló que es un apasionado de la agricultura y a través de ese interés logró desarrollar capacidades bastante interesantes en este tema, que lo ayudaron a cumplir su meta de tener su propio cultivo de mamones. Explicó que en la preparación del suelo utilizaron excremento de vacas, un tipo de abono utilizado desde hace mucho años para que la tierra sea más productiva.
Comentó que este proceso les llevó al menos 3 meses debido a que debían remover la tierra con el abono para que pueda actuar a fin de que el cultivo sea más eficiente. Posteriormente procedieron a ubicar los plantines en sus lugares y al riego constante durante todo este tiempo, atendiendo a la dura sequía que enfrentó el país, la cual afectó mucho al cultivo.
Para el mejor manejo, señaló que decidieron cultivar solamente 200 plantas de mamón y hoy están procediendo a la cosecha que superó las expectativa que tenían. Hasta la fecha, llevan al menos 1.200 kilogramos de esta fruta cosechada en lo que va del primer periodo.
Armando explicó que realiza las ventas de forma directa a los consumidores finales, pero no descarta poder distribuir en centros de ventas en todo el país. Aseguró que prevén aumentar el número de plantas a 600 de modo a lograr una mayor productividad para contar con la capacidad de llegar a más personas con este gran producto. LN