Dicen por ahí que los cuentos y fábulas en algún momento se replican en la vida real. En 1597 el afamado escritor inglés William Shakespeare publicaba su obra “Romeo y Julieta”, una trágica historia de amor cargada de prejuicios y protagonizada por dos jóvenes que no pudieron consolidar sus pasiones libremente. Lo sucedido a continuación tuvo lugar en la ciudad de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro, una notable coincidencia con lo mencionado más arriba.
Él es Abram Fehr, un joven menonita de 22 años de la Colonia Manitoba, y ella, Sandra Paredes, una joven de profesión veterinaria de 30 años, oriunda del departamento de Caaguazú. Ambos se conocieron en el 2021 a través de las redes sociales y fue amor a primera vista, según cuentan. Por desgracia, las costumbres menonitas no permiten a sus miembros casarse con personas que no pertenezcan a la colonia y es por eso que, desde el inicio, la relación no tuvo aceptación de la familia del joven.
Pese a los infortunios de la vida, Abram y Sandra hacían lo imposible para verse y vivir el amor genuino que los une y precisamente el fruto de ese amor se ve reflejado en el cuerpo de Sandra, embarazada de 5 meses. Abram y Sandra se casaron en febrero pasado, el joven salió de su colonia y fue hasta la ciudad de Coronel Oviedo para contraer matrimonio, pues el avanzado estado de embarazo de la joven impidió que realice un viaje tan largo.
La felicidad de los recién casados duró muy poco, el jueves último, los padres de Fehr presentaron una denuncia por apropiación contra la pareja porque el joven había llevado la camioneta de su padre hasta Coronel Oviedo. Según la denuncia, policías vestidos de civil detuvieron a ambos porque supuestamente ya contaban con orden de captura. Los jóvenes fueron trasladados hasta la Comisaría 18ª de Santa Rosa del Aguaray, donde pasaron la noche en un calabozo.
Afortunadamente, al día siguiente, la Fiscalía ordenó la liberación de la pareja, pero pese a eso los jóvenes manifestaron temer por su vida. Sin embargo, el amor que se tienen es mucho más fuerte que cualquier miedo y aún con el reclamo de su madre y hasta una exnovia del joven que le imploraron volver a la colonia, Abram decidió una nueva vida junto a Sandra y el bebé, que llega el próximo mes de julio. LN