Larissa Riquelme dijo que ahora se siente mucho más madura y que prefiere ya ser directa, más sincera.
Contó a Crónica que antes se preocupaba de caer bien y trataba de cuidar sus palabras. Pero upéa opáma. “Me volví mala, me volví sincera”, dijo.
Larissa Riquelme hizo una reflexión en su Twitter sobre su actitud, sobre su forma de comportarse con la gente. “Me volví mala, me volví sincera, ahora digo lo que pienso y siento. Ya no me callo. Si algo me molesta, uy… Sin filtro!!”, dijo. Hablamos con ella y dijo que eso le salió debido a que hay gente que le extorsiona en lo laboral, refiriéndose a su trabajo para marcas, en redes.
“Hay gente que me persigue, que se va a las empresas con las que trabajo y busca ponerme mal. El sol sale para todos”, dijo.
“Hay empresas que valoran y saben del valor que doy a sus productos. Si alguno no entiende, no me callo, yo me defiendo”, dijo.
Comentó a Crónica que, de hecho, ya venía con un cambio en su actitud, porque aquella Larissa hasta casi ingenua, la que trataba de sonreír ante todo, que intentaba caer bien a todos, ya quedó atrás, dijo. “Me cansé de que me traten de sonsa, porque no lo soy”, aseguró.
“Si algo me molesta, lo digo. Quien me valora, me va a aceptar así y no se va a molestar. Creo que en la vida vale más ser frontal, decir las cosas como son”, le bajó. Y resaltó que este punto también aprendió en el Canal donde ahora labura, el Trece.
“Hay apoyo, te empujan a crecer, no se siente la hipocresía, la falsedad. Ahora trabajo con gente muy profesional en televisión”, le bajó.
