La Itaipú Binacional, a través de su asesoría de Energías Renovables, y la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (Fiuna) llevan adelante una cooperación técnica para la puesta en funcionamiento de vehículos eléctricos en desuso de la entidad.
Desde la binacional explicaron que el objetivo de este proyecto es promover la investigación y capacitación de docentes y estudiantes en el campo de las energías renovables y de la movilidad eléctrica con nuevas tecnologías.
Tras meses de trabajo, los especialistas de la casa de estudios realizaron el diagnóstico del estado de dos furgonetas, encontraron las fallas técnicas y las readaptaron para que puedan ser alimentadas por energía solar.
Los rodados, totalmente funcionales, tienen una autonomía de aproximadamente 100 kilómetros y la recarga total orilla las 5 horas. Los paneles solares, instalados en los techos, cargan la batería para hacer funcionar las prestaciones auxiliares, tales como luces y refrigeración.
El ingeniero Pedro Domaniczky, asesor de Energías Renovables, agradeció a la Fiuna por aceptar el desafío de reactivar unos vehículos que prácticamente ya estaban desechados. No solo se pudieron poner a punto y volverlos operativos, sino que también se pudo dar un nuevo valor agregado con el sistema de aprovechamiento solar, refirió.
Apuntó que, si bien aún no otorga un gran aumento en la autonomía del rodado, ayuda a incrementar la batería y constituye toda una innovación.
“Ahora se abre un campo de investigación importante en la Fiuna con todo nuestro gran potencial solar, esto permite dar proyecciones y trabajo a largo plazo. Pensando, en un futuro, en posibles fábricas de movilidad eléctrica. Pero para nosotros lo más crítico es el capital humano capacitado. Estos son los primeros vehículos solares-eléctricos del país, es un hecho histórico”, enfatizó Domaniczky.
Capacitación en energías renovables
Rubén Alcides López, decano de la Fiuna, expresó su satisfacción por el logro alcanzado y remarcó la importancia de que el capital humano de la universidad se vaya capacitando en energías renovables para trabajar con automóviles eléctricos y nuevas tecnologías; las cuales, en el futuro, van a imperar en el mercado. Relató que en este proyecto participaron docentes, estudiantes y técnicos del área mecánica, eléctrica y electrónica.
Primo Cano, vicedecano de la Fiuna, añadió que el principal desafío fue encontrar las fallas de las furgonetas, ya que no se cuenta con un escáner que las pueda leer a nivel local. Después de mucho trabajo, fueron identificados los diversos problemas, se cargaron las 104 celdas del banco de baterías y luego se fueron reparando todos los demás componentes, detalló.
Finalmente, se instalaron 300 vatios de paneles solares semiflexibles con un regulador de carga para una batería de 12 voltios. Remarcó que este trabajo ayudó a transferir conocimientos y confirmó la necesidad de incluir la materia de Movilidad Eléctrica en la malla curricular de la facultad.
Otros dos vehículos eléctricos se encuentran actualmente en la Fiuna para pasar por el mismo trabajo de reparación y reacondicionamiento. No obstante, la Asesoría de Energías Renovables de Itaipú y la alta casa de estudios analizan la posibilidad de implementar la tecnología de hidrógeno en el proceso de adaptación.
Esta dependencia de la binacional encara diversos proyectos de investigación y desarrollo sobre fuentes renovables no convencionales en diferentes frentes, a fin de fomentar la innovación energética, la sostenibilidad de los emprendimientos y el acceso de más personas a energía limpia. Todas las iniciativas se enmarcan dentro de las prácticas “Energías Renovables y Eficiencia Energética”, las cuales promueven el desarrollo sostenible. LA NACION