El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, informó hoy martes, 11 de agosto, que se está conversando con el gobierno del Brasil para avanzar en lo referente a la construcción de una esclusa de navegación en la Margen Derecha, tal como lo dispone el Anexo B del Tratado de ITAIPU. Afirmó que es también posible avanzar en la construcción; pues, el Tratado habla de llevar adelante este proyecto de navegación en un tiempo oportuno.
“Esto también nos va a permitir mejorar la navegación, una vez que avance esta obra que llevará su tiempo, dado que tiene todo un proceso. Seguramente ya no se va a concluir en este periodo presidencial, pero existe la voluntad política de los gobiernos para poder avanzar en la obra que beneficiará a ambos países”, puntualizó el Jefe de Estado.
El Mandatario realizó esta mención en el marco de la presentación de la operativa denominada “ventana de agua”, transmitida por videoconferencia en Palacio, para permitir la salida de un importante cargamento de productos agrícolas a los mercados internacionales, gracias al mejoramiento de la navegabilidad del río Paraná.
Antecedentes
Es de mencionar que el proyecto de esclusa de navegación ha sido motivo de un total de 4 estudios desde principios de los años 70, con la participación de técnicos de ambas márgenes y la asistencia de empresas de reconocida capacidad mundial. El propósito de las obras de navegación es salvar los 120 metros de diferencia en la altura existente entre las cotas de niveles del río, a cada lado de la represa de ITAIPU.
En el 2017, por Resolución del Directorio Ejecutivo de la ITAIPU Binacional (RDE 140/2017), se conformó un Grupo de Trabajo Binacional para analizar y proponer acciones necesarias para la actualización del costo estimado de las obras permanentes de navegación fluvial. En ese contexto, se había ordenado la realización de estudios de factibilidad económica, técnica, análisis del impacto socioambiental, seguridad náutica y anteproyecto de la esclusa de navegación.
Los estudios a cargo de Witteveen+Bos (Holanda), supervisados por la Compañía Nacional del Ródano (Francia) y la ITAIPU, hablaban de un costo aproximado de 1.500 millones de dólares para su construcción y un costo de operación de 8,2 millones de dólares al año.
En función al escenario de proyección del tipo y volumen de carga, así como a la inversión a ser realizada, el análisis determinó que es un proyecto viable. Así también se encontró que la instalación de la esclusa sería más factible en la margen paraguaya.
