España volverá a abrir sus fronteras con sus vecinos de Francia y Portugal a partir del 22 de junio, coincidiendo con la finalización de la prórroga del estado de alarma que permitirá hasta entonces las restricciones a la circulación. La medida se adelanta así casi diez días, pues el presidente Pedro Sánchez había anunciado que este levantamiento de los controles fronterizos se produciría el 1 de julio.
Tanto la aceleración de la desescalada interior como la apertura de fronteras responde a la necesidad de reactivar el sector turístico, clave en la economía española, ante la presión de países competidores, como Italia y Grecia, que ya han tomados estas disposiciones con la mirada puesta a los visitantes extranjeros. RT