Tras posicionarse en el puesto número 1 del ranking del Índice de Clima Económico (ICE), elaborado por el Instituto Brasileño de Economía de la Fundación Getulio Vargas (Ibre/FGV), Paraguay pasó de 28 puntos positivos a los 70,4 puntos entre enero y abril, mientras que Brasil bajó de 2 a 60,9 puntos.
El informe señala que el clima para hacer negocios en América Latina se ubicó en su peor nivel en 3 décadas debido al impacto generado por la pandemia del nuevo coronavirus, ya que pasó de los 14,1 puntos a los 60,4, situándose en su menor nivel desde enero de 1989, año en que comenzó a realizarse la medición.
Si bien desde el 2018 el indicador estaba en negativo, había empezado una leve mejoría, y según el informe, a principios de este 2020, América Latina estaba en una fase de recuperación del ciclo económico con el indicador de expectativa mejorando y en positivo, pero para abril de este año, la crisis sanitaria condujo a la región a una recesión y revirtiendo la expectativa inicial con la situación actual.
Así fue que las expectativas favorables de enero, cuando apuntaban a una posible continuidad de la tendencia de mejora del clima económico, apareció el COVID-19 en la región e interrumpió la posible recuperación, señala el informe de la FGV.
Otros países con índices negativos son: Argentina que pasó de 42,9 puntos en enero a 67,2 puntos en abril, Bolivia de 22,7 a 68,9, México de 28,4 a 62,7 puntos y Perú 1,8 a 59,0. En tanto que los mejores posicionados, aunque con índices negativos son: Chile que de 33,9 pasó a 48,4; Colombia de 2,9 a 48,8 y Uruguay desde 2,8 pasó a 50 puntos. Al final de lista figura Venezuela, cuyo indicador había mejorado y llegado en el primer mes del año a 58,6 puntos pero obtuvo 100 puntos en abril, Ecuador también cayó de 58,6 puntos a 100.
El informe indica además que de acuerdo al índice promedio en los últimos cuatro trimestres, Paraguay (-7,1 puntos) permanece como el país con mejor clima para negocios en América Latina, seguido por Colombia (-12,3), Chile (-18,5), Perú (-22,0) y Uruguay (-26,6).
El estudio se realiza en 11 países de América Latina, y en todos ellos, la falta de innovación y la demanda insuficiente fueron consideradas cuestiones relevantes, además de la corrupción que fue considerada como un problema importante en 9 países, y solo no lo fue para Chile y Uruguay, sostiene el reporte.
Boom económico
Para que Paraguay pueda salir de la crisis económica que trajo consigo el COVID-19, y mejorar su clima de negocios, no solo para la inversión extranjera sino también la nacional, necesita de un boom económico que pueda reactivar y generar una importante inyección a la economía.
Así lo indicó el empresario y economista Jorge Pappalardo en entrevista con La Nación, al tiempo de sugerir dos opciones, una, que no es la ideal ni lo recomienda, la de endeudar aún más al país pero solo para ejecutar inversiones y de ninguna manera para gastos rígidos. Mientras que la segunda opción es la de generar una inversión o un fondo soberano a través de la Itaipú Binacional, adelantando el capital y de lo que producirá en 40 años al presente, teniendo en cuenta que para el 2023 el país cancelará su deuda.
La idea es que con ello se pueda pagar toda la deuda del país, así salir del tercer mundo y estar en una posición cercana a ser el país más desarrollado de América Latina, para recibir las mejores inversiones para Paraguay, mencionó.
“Itaipú es el activo más importante que tiene el Paraguay, y que en el 2023 va dejar de pagar la deuda, es una importante oportunidad para que el país pueda aprovechar, y que el presidente Mario Abdo Benítez proponga al Brasil, mantener los precios de la venta de energía a la Ande y al lado brasileño, e inyectar por ese excedente un capital de hasta US$ 60.000 millones, es como traer plata del futuro para usarlo ahora, pero que se va ir pagando a través de inversión en obras por el método de revolving o de renovación automática”, expresó. La Nacion