Especialista comentó que el uso continuo de equipos de bioseguridad es muy superior a la cantidad de pacientes que se tiene internados en el país.
Asunción- (Nancy Villagra) El director del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (INERAM), hospital especializado en Covid-19 en la capital del país, Dr. Felipe González, sostuvo que si bien los equipos de bioseguridad son indispensables para el personal de blanco, actualmente Salud consume mucho más, en relación a la cantidad de pacientes positivos que se tiene.
Expresó la necesidad de analizar la sostenibilidad de estos insumos y equipamientos a largo plazo y discutir la producción a nivel país de los materiales de alta seguridad. El Ministerio de Salud recibió ayer el último cargamento de insumos por G. 80.000 millones adjudicado a Imedic y Eurotec, y rechazados en un principio otro cargamento por no cumplir con las especificaciones técnicas.
La contagiosidad y letalidad del coronavirus demanda la utilización de quipos de alta seguridad, siendo en algunos casos insuficientes para el sector de blanco, con el riesgo físico de muchos médicos en nuestro país y el mundo. En Paraguay, incluso la primera víctima mortal de Covid-19 fue el Dr. Hugo Díez Pérez. A casi un mes de que el Círculo Paraguayo de Médicos informara que 29 trabajadores de Salud dieron positivo y más de 400 fueron a cuarentena. El Dr. González dijo a Agencia Hoy que si bien se hacen todos los esfuerzos en racionalizar los insumos, no obstante, recomienda en que se debe comenzar a analizar los mecanismos para la sostenibilidad de la provisión de insumos a futuro.
Según comentó el uso continuo de equipo de bioseguridad es muy superior a la cantidad de pacientes que se tiene. “Tengo casi 900 funcionarios en el hospital y ahora estamos contratando más y en el sector de aislamiento, en todo el hospital tenemos solo cuatro positivos, pero todo el hospital tiene que usar obligatoriamente equipos de protección”, refirió. Añadió que lo mismo ocurre a nivel país, que totaliza solo 9 casos internados, y ninguno de ellos en terapia y si hacemos un cálculo rápido estamos usando más equipos de protección que pacientes.
Resaltó que es ahí donde se debe discutir si es realmente posible sostener en el tiempo la magnitud de lo que estamos usando para proteger al sector de blanco. “Sabemos que es necesario, pero es una realidad prever si vamos a alcanzar para sostener el impacto a largo plazo, porque no es una enfermedad que podamos afirmar que de aquí a seis meses va a terminar. En nuestro hospital, en estos dos meses no tenemos un solo contagio del personal, pero no podemos estar dependiendo de lo que va a venir o no, porque en este momento la demanda es muy alta y la lucha es desigual. Nuestra fortaleza está en nuestra solidaridad interna”, aseveró.
El profesional mencionó que existe mano de obra nacional dedicada a confeccionar barbijos y otras indumentarias, pero no son las que necesitan técnicamente. “A los que hoy nos están haciendo con sumo amor, les falta todavía ese bagaje técnico, para que tengan una real validez. Sabemos que lo están haciendo con mucha solidaridad, pero se debe ver para que las industrias nacionales fabriquen ya con el mismo rigor técnico necesario para combatir este tipo de virus, porque mientras se depende del mercado internacional, que es tremendamente competitivo en estos momentos”, apuntó.
El Ministerio de Salud ya adjudicó G. 80.000 millones a las empresas Imedic y Eurotec, para la provisión de equipos de bioseguridad traídos de China. Un cargamento que llegó ayer, con 101.000 kilos, entre mascarillas, trajes de protección y respiradores.
Al respecto González dijo que hay que entender que nosotros en el país no se fabrica y asegura que nadie de nuestros vecinos nos proveerá, porque están usando para sus propios connacionales. “Nos resta solamente traer de países asiáticos, porque ninguno de los países europeos ni tampoco Norteamérica nos va a vender, porque son epicentros de la pandemia hoy. China tiene 1.500 empresas certificadas dedicadas al rubro de fabricación de protección personal y es el epicentro de la venta de los equipos biomédicos”, afirmó.
INFORMALIDAD DE ALGUNAS EMPRESAS CHINAS
Consultado sobre los equipos provenientes de China que fueron rechazados, manifestó que el país no es el que compra, son los importadores que tienen un contado en estos sitios y son burlados por la informalidad de los mismos. “No está en nuestro ámbito, fueron rechazados por defecto de forma”, acotó.
Sostuvo que a partir de esta pandemia en China se han creado 30 mil empresas más sin certificación, a parte de las ya mencionadas, y la posibilidad de que lleguen equipos de no muy buena calidad es muy alta. “Uno no sabe, es un mercado muy informal en cuanto a su gerenciamiento de insumos, y podemos caer a veces en adquirir algo que no tienen la calidad que uno desearía”, lamentó.
Recalcó que hay un sinnúmero de dificultades, que somos un país mediterráneo, alejado de todos y que será difícil poder conseguir los insumo. “Tenemos el ejemplo de Irlanda que adquirió de China Continental una partida importante de equipos de protección, pero el día del embarque Alemania paga casi el doble y le quitan todos sus equipos, se volvió una guerra de todos contra todos. A nosotros nos ha arrebatado algunos de los insumos que teníamos destinados para nuestro país, tanto de Brasil como Estados Unidos”, recordó.
Reiteró que se debe apostar a la industria nacional y destacó que la totalidad de los elementos compresores y todo lo que se utilizó en la construcción del hospital de contingencia del INERAM fue producto y mano de obra nacional. “Esto es señal de que podemos, pero no pensemos en el mundo ideal donde no vivimos. Se llevó a la ciudanía a la cuarentena total a la espera de tener nuevos equipos y fue con mucho sacrificio y después tropezamos con que no eran los adecuados, tratemos de salir adelante, con los desaciertos”, finalizó el especialista.
