La bajante registrada en el río Paraná se debe a la falta de lluvias en la cuenca baja del río. Así lo indicó el Ing. Hugo Zárate, superintendente de Operación de la Dirección Técnica de la Entidad, quien aclaró que existen más de 50 centrales de aprovechamiento aguas arriba de ITAIPU, pero la fuente de suministro del embalse proviene, precisamente, en un 80% de dicha afluencia regulada recibida como resultado de las operaciones de esas centrales, y el 20% restante viene de las contribuciones de los ríos tributarios que desembocan en el embalse.
“Ese 20% prácticamente desapareció este trimestre, mientras que el 80% sigue dentro de los parámetros normales para esta época del año. El problema es la falta de lluvias, insistió el superintendente de Operación.
Explicó que las bajas afluencias hacen que el río Yguazú tenga una descarga en niveles históricos mínimos, al igual que el río Paraná. Asimismo, señaló que el nivel de descarga en ITAIPU es directamente proporcional a la demanda de energía y, actualmente, la Central Hidroeléctrica se encuentra con valores de descarga muy bajos porque la demanda está baja.
De acuerdo con los datos proporcionados por la Dirección Técnica, hasta el 12 de abril, la producción fue en torno a un 36% inferior al registrado para el mismo periodo de 12 días de abril, entre los años 1999 y 2019.
Esta situación debe continuar hasta fin de mes a la espera de alguna precipitación significativa en el área incremental del embalse y más al sur sobre la cuenca del Yguazú, donde se da la confluencia con el Paraná, indicó el Ing. Zárate.
Recalcó que se trata de un fenómeno atípico debido a la bajísima precipitación en el área del embalse y la cuenca baja en el sur, aunque más al norte en la cuenca alta del Paraná se están registrando lluvias, pero no muy significativas