Una delegación de nueve expertos investigadores y médicos chinos, que combatieron la propagación del coronavirus en la ciudad de Wuhan, foco del brote, llegaron este viernes a Italia para ayudar al país a superar esta emergencia por el COVID-19.
“Hemos venido con 31 toneladas de material sanitario, entre ellos respiradores mecánicos, mascarillas y otros equipos (como electrocardiogramas). Esperamos que compartiendo nuestra experiencia podamos ayudar a Italia a superar esta emergencia”, declaró el vicepresidente de la Cruz Roja de China y responsable de este equipo, Yang Huichuan, en rueda de prensa en Roma.
Superado el pico de transmisiones en China, este grupo de expertos está decidido a prestar su ayuda, sus conocimientos y su experiencia a Italia, el país de Europa más afectado, con más de mil fallecidos, según el último balance oficial.
Igual que en China, el Gobierno italiano adoptó medidas muy restrictivas para intentar frenar esta pandemia, limitó los movimientos de personas a nivel nacional, cerró todos los negocios que no ofrezcan servicios esenciales y también escuelas, universidades, cines, museos y teatros; y suspendió concentraciones públicas y eventos deportivos.
Todo con el objetivo de evitar que el número de infectados siga subiendo descontroladamente, como lo hizo hasta ahora día tras día.
“Aplaudimos todas las medidas adoptadas por el Gobierno italiano, que son muy similares a las tomadas por China y que han dado resultado. Estamos convencidos de que Italia saldrá lo antes posible de esta crisis”, dijo por su parte el embajador chino en Roma, Li Ruiyu.
El embajador explicó que los nueve expertos “han estado en la provincia de Hubei, en la ciudad de Wuhan (foco del brote de coronavirus), combatiendo el virus en primera línea” y que ahora están decididos a compartir con Italia lo aprendido para que el país y el resto del mundo erradiquen este virus.
El ministro de Asuntos Exteriores italiano, Luigi Di Maio, dejó claro que Italia tiene ante sí dos objetivos que cumplir, sanar a los enfermos y curar asu maltrecha economía, que corre el riesgo de entrar en recesión.
Un avión procedente de China aterriza en Italia con material útil y expertos médicos que ayudarán a combatir el coronavirus pic.twitter.com/zpcoQowCZt
— EL MUNDO (@elmundoes) March 13, 2020
Para alcanzar la primera meta, Di Maio insistió en la necesidad de que la gente evite salir a la calle, salvo por necesidad, y realizó un llamamiento para que los italianos donen sangre, tan necesitada en estos días por parte de los hospitales que luchan a contrarreloj para curar a los infectados.
En el caso de la economía, las medidas drásticas aprobadas por el Gobierno italiano penalizarán las cuentas de resultados de las empresas y esto puede derivar en un castigo al empleo.
Para mitigar estas consecuencias, el Gobierno italiano está preparando ayudas de hasta 25.000 millones de euros que si las utiliza en su totalidad supondrá disparar el déficit previsto del país al 3,3 % del producto interior bruto (PIB) este 2020.
El pasado jueves, China declaraba que el pico de transmisiones había llegado a su fin, pero por ahora no levantó las estrictas medidas de prevención que mantienen a gran parte de la población en sus casas.
Según el último recuento de la Comisión Nacional de Salud de China, el país tuvo sólo ocho nuevos casos de contagio en las últimas 24 horas, unas cifras esperanzadoras a las que miran con atención Italia y el resto de Europa.
En Italia, los primeros casos se detectaron a finales de febrero y en sólo tres semanas los contagios totales superaron los 15.000, entre enfermos, curados y fallecidos; el país ha quedado bloqueado, otros países como España han restringido los vuelos procedentes de cualquier aeropuerto italiano y numerosas aerolíneas han cancelado sus trayectos durante varias semanas, algunas hasta principios de abril. HOY