MOPC destruyó laguna en Bella Vista que habría sido formada por meteorito

El MOPC partió en dos una milenaria laguna de Amambay formada posiblemente por algún meteorito para habilitar la ruta que une Bella Vista Norte con la colonia Rinconada, ex Antebi.


Nacionales: 24 de feb de 2020

notas

En 2014, Cartes, en vez de intentar volverlo a su estado natural usó los bonos soberanos para asfaltar la vía. En el departamento de Amambay, a unos 50 kilómetros de Bella Vista Norte, una laguna milenaria fue prácticamente destruida por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) al permitir un rellenado, que dividió en dos pedazos el cuerpo de agua, para habilitar una ruta que iba a interconectar varias comunidades.

En el MOPC no proveyeron los antecedentes de la apertura de la ruta.

Dijeron a ABC que solo tenía a mano los datos de la pavimentación asfáltica adjudicada en 2014 por G. 261.000 millones, bajo la presidencia de Horacio Cartes, al Consorcio Gral. Aquino, integrado por las firmas M&T de Julio Mendoza Yampey y CIVSA de Isacio Vallejos, exdecano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional.

El estudio de factibilidad de la ruta, según el pliego de bases y condiciones de la construcción del asfalto, estuvo a cargo del ingeniero Miguel Fernández Madero, de la consultora Servingci SRL. Sin datos de laguna ni ruta. No hay certeza del año en que nació la laguna ni tampoco el año de habilitación de la ruta.

Pues en cuanto a la laguna, los investigadores dicen que fue antes de Cristo a raíz de la caída de algún meteorito y sobre la construcción del camino, encontramos diferentes versiones.

Algunas refieren que se abrió en la época de Juan Carlos Wasmosy, mientras que otras versiones aseguran que fue con el crédito chino bajo la presidencia de Luis Ángel González Macchi.

También hay rumores de que se construyó durante el gobierno de Stroessner, en 1980. Lo cierto es que en otros países, las lagunas de este tipo son celosamente custodiadas, preservadas y explotadas turísticamente. Justamente, a escasos 35 kilómetros de la Laguna Platillo está la Laguna Ojo de Mar, donde se realiza turismo de aventura extrema.

A la gente le gusta bucear en sus profundas aguas. Según los datos, allí habitaban unos cocodrilos blancos, que ya se extinguieron.

Debe investigar la fiscalía El ambientalista Enrique Wagener calificó de gravísimo el hecho de que se haya destruido el medio ambiente y considera oportuno que el Ministerio Público tome cartas en el asunto.

“Antes de emitir cualquier opinión hay que ver la parte legal, si tiene el permiso del municipio y del Mades, pero de todas maneras, considero que el Ministerio Público debe investigar.

Es gravísimo para la parte ambiental”, señaló Wagener, de la Fundación Paraguay SOS. Lo que queda ahora es exigir una compensación por ese daño irreparable, agregó. A su turno, el historiador y arquitecto Jorge Rubiani señaló que “fue una tremenda irresponsabilidad del Ministerio de Obras Públicas que sencillamente se pasaron por encima del patrimonio como en otros lugares del país, hicieron sus carreteras de la manera más cómoda posible sin prestar atención a otros factores que pueden otorgarle a la carretera un atractivo diferente”.

ABC consultó al Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) los datos del estudio ambiental que haya otorgado para la construcción del pavimento o la apertura del camino, pero no respondieron.

El exdirector jurídico del Mades de la época de Horacio Cartes, Hugo Cañiza, dijo, por su parte, que se debe ver qué dice la Ley 3239/07 de los recursos hídricos para ver qué reglas tiene en este tipo de casos.

En los proyectos –según dijo– debe prevalecer el rechazo en caso de eventuales daños ambientales, pero refirió que hay que ver si la Laguna Platillo es un cuerpo de agua artificial o natural, si fue una zona de préstamo anteriormente y luego expedirse conforme a la ley.

Agregó que “si estamos hablando de una laguna natural, debió haberse protegido. Lo que pasa es que la protección es contraria a los costos de la obra probablemente. Seguramente desviar el cuerpo de agua sería económicamente más elevado en costos”, expresó.

Algunos miembros de la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco) también calificaron de criminal la obra. Se pudo haber desviado el trazado de la ruta, para mantener intacta la laguna y el bosque que la rodea.

Si bien iba a significar una inversión mayor para el Estado, permitiría preservar el espejo de agua y evitar un daño irreparable al ecosistema, dijeron a ABC.