Cecilia Pérez, viceministra de Política Criminal, dijo que hubo varios factores en torno al asesinato de un interno del “clan Rotela” anoche en la cárcel de Tacumbú. La víctima había sido homicida de otro recluso el viernes pasado. La funcionaria estatal alegó que esto sucedió por la superpoblación en el sitio y por las carencias de recursos económicos e insinuó que pudo haber desidia de los guardiacárceles, que están en conflicto sindical con el Ministerio de Justicia. “Está difícil el esquema interno (de Tacumbú)”, sostuvo.
POR ABC COLOR
Arnaldo Fabián Giménez, quien había matado el viernes pasado a Luis Antonio Ortiz, otro interno, fue asesinado anoche por Juan Carlos Carrera y Eduardo David Galeano Barreto, ambos de 19 años y con frondosos antecedentes, según la Policía. Todos serían parte del “clan Rotela”, liderado por Armando Javier Rotela Ayala, conocido como “el zar del microtráfico”.
El homicida fue asesinado en el pabellón de Sanidad de la cárcel de Tacumbú y Juan Carlos Carrera y Eduardo David Galeano Barreto se hicieron pasar por enfermos para entrar a ese lugar.
Al respecto, la viceministra de Política Criminal, Cecilia Pérez, conversó este lunes con radio ABC Cardinal y dijo que “hay control” en la penitenciaría, pero “hay cosas difíciles de evitar”.
“Esta clase de episodios son difíciles de evitar con el esquema que tenemos en Tacumbú (…) La cantidad de gente trabajando, cómo está el sistema hoy. Estamos teniendo ingresos masivos, el cambio de la ley hizo que merme un tiempo, pero ahora estamos de nuevo con ingresos importantes y eso ya no es culpa de la ley”, sostuvo la funcionaria del Ministerio de Justicia.
La viceministra indicó que “está difícil el esquema interno” de la cárcel, al insinuar una desidia de su director interino, Hernán Bogarín. El 25 de octubre pasado había renunciado el anterior, Jorge Fernández.
“Algo sucedió puntualmente de no estar en alerta expresa después de lo que sucedió el otro día (viernes pasado). Teóricamente, los que ingresaron (a asesinar a Arnaldo Fabián Giménez) son ‘pasilleros’, no propiamente del ‘clan Rotela’”, manifestó Pérez.
Pérez indicó además que el conflicto con los guardiacárceles, que reclaman aumentos salariales y bonificaciones por exposición al peligro, pudo haber influido en el caso.
“Los conflictos en general en el esquema son complejos. No podemos caer en un análisis superficial. Estamos en un momento de crisis agravada por el tema sindical. El tema sindical es justamente el descuido, o mirar por otro lado, o no intervenir. Estamos buscando sentarnos a hablar sobre este tema (…) Esto se sale un poco de los análisis de lo que solemos hacer”, dijo.
En otro momento, Pérez lamentó las condiciones de trabajo y señaló que el sistema penitenciario está “en extremo deteriorado. Nunca llegamos al punto en el que estamos encontrando las cosas. La Inspectoría recién llegó a funcionar ahora. Es una tarea difícil, tenemos pocas herramientas y tenemos que trabajar en estas condiciones. Me gustaría presentar fórmulas mágicas, pero no es factible con el sistema penitenciario”, expresó.
Por último, criticó que “nadie quiere poner plata” para mejorar el sistema penitenciario. Algunas veces esto ocurre, según su opinión, porque no hay dinero y, en otras, porque “a muchos les conviene” que el sistema siga así.