Dublín, Irlanda | AFP
Irlanda anunció este miércoles la apertura de una investigación por el pirateo de 50 millones de cuentas de la red social Facebook, la primera aplicación a gran escala del reglamento europeo de protección de datos.
“La Comisión Irlandesa de Protección de Datos (DPC) abrió hoy, 3 de octubre de 2018, una investigación” para “verificar si Facebook cumplió con sus obligaciones legales de protección de datos”, dijo el portavoz del organismo en un comunicado.
Facebook, cuya sede europea se encuentra en Irlanda, “informó a la DPC que su investigación interna seguía en marcha y que la empresa continuaba tomando medidas correctivas para atenuar los potenciales riesgos para los usuarios”, precisó.
Con la apertura de esta investigación se aplica por primera vez contra un peso pesado de internet el reglamento europeo sobre la protección de datos (RGPD), que entró en vigor en la Unión Europea el 25 de mayo.
Este reglamento busca proteger los datos personales de los europeos, reforzando los derechos de los internautas y estableciendo obligaciones claras para las empresas en el tratamiento de los datos.
También concede a los reguladores europeos nuevos poderes de control y sanción en caso de que las empresas violen las normas al recabar información personal.
“Estamos en estrecho contacto con la DPC desde que tenemos conocimiento del ataque y seguiremos cooperando con su investigación”, reaccionó un portavoz de Facebook contactado por la AFP.
El texto europeo prevé multas de hasta 20 millones de euros o del 4% del volumen de negocios para las empresas que no respeten el reglamento.
Facebook ingresó en 2017 más de 40.600 millones de dólares.
La última falla de seguridad de Facebook, revelada por la red social a finales de septiembre, habría afectado a unos 5 millones de europeos entre los 50 millones de cuentas afectadas, indicó el martes a la AFP la comisaria europea de Justicia, Vera Jourova.
La falla, que fue “reparada” según el fundador y presidente de Facebook, Mark Zuckerberg, permitió que los piratas tuvieran acceso a información del perfil de los usuarios como sus nombres, sexo o lugar de residencia.
Este pirateo de gran escala reavivó las críticas contra la red social, afectada ya por varias controversias, relativas sobre todo a la protección de los datos personales.